Si acudimos a Wikipedia, un boudoir es una pequeña habitación en una vivienda situada entre el comedor y el escritorio. El marques de Sade, autor literario, contribuyó a desarrollar la fama de esta pequeña habitación dedicada a las conversaciones femeninas íntimas y donde recibían a los íntimos… Actualmente hemos trasladado ese concepto de la Francia de los siglos XVIII y XIX a la fotografía.
Para mí el objetivo de la fotografía boudoir es transmitir elegancia, belleza y sensualidad. En mis sesiones busco que sea la ocasión de vivir una experiencia divertida, única e irrepetible. Que te brinde la oportunidad de conectar contigo misma, de encontrar tu lado más femenino, de confiar en ti. Que te haga sentir musa por un día.
Además de una sesión para ti, también puede ser un regalo muy original, íntimo y que la persona a la que se lo dediques, recuerde para siempre.
Me entusiasma tener delante de mi cámara a una mujer que muestra su alma. Es apasionante y enriquecedor. Me inspiro en cada una de ellas, y les estoy muy agradecida por mostrarse ante mi confiadas y seductoras. Cada mujer es única y capturar su belleza a través de mi cámara, se convierte para mí en algo realmente especial, porque es un momento irrepetible.
Uno de mis referentes en fotografía boudoir es Christa Meola. Ella nos enseña en su exitoso libro «Fotografía Boudoir: El Arte de la Sensualidad», que este tipo de fotografía es el arte de sacar a la luz la parte más sensual de cada mujer y dejarlo plasmado . Un libro cuidado, hermoso y muy recomendable, aquí os dejo un pequeño ejemplo: